miércoles, 5 de marzo de 2014

Un diminuto picamaderos

Pico menor en una rama de álamo blanco
Esta mañana, en el Soto de Ranillas, he tenido la suerte de disfrutar de la observación fugaz de un pico menor (Dendrocopos minor) que se movía por las ramas altas de un álamo blanco (Populus alba) emtiendo sus típicos gritos. El pico menor es un picamaderos muy pequeño, siendo su tamaño prácticamente el mismo que el del gorrión común. Resulta difícil verlo debido a su tamaño tan pequeño y a que se mueve habitualmente en la parte alta de las copas de los árboles caducifolios, entre una densa maraña de ramas y follaje. De no ser por sus gritos y tamborileos, este pájaro sería muy difícil de detectar, pero ahora, a finales del invierno, los picos menores se encuentran en celo y son más ruidosos y fáciles de localizar en los árboles que aún no han echado hoja. La detección de esta especie en Zaragoza es relativamente reciente, conociéndose registros en los sotos de Ranillas y Cantalobos, Galacho de Juslibol (donde tomé las fotos testimoniales que ilustran esta entrada) y ribera del Canal Imperial junto al Parque de Plaza.

Detalle del pico menor 
Todo parece indicar que esta especie de picamaderos ha ampliado su área de distribución en Aragón en las últimas décadas al igual que el pico picapinos (Dendrocopos major), mientras que el pito real (Picus viridis) se ha rarificado de forma apreciable.

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