Los halcones nos dominan

La utilización de los grandes edificios por parte del halcón peregrino (Falco peregrinus) es un hecho bien conocido en muchas ciudades de mediano y gran tamaño. Pueden emplear los edificios para nidificar o simplemente como posadero, atalaya o lugar de descanso. En algunas ciudades se ha fomentado la nidificación mediante la colocación de nidales artificiales, caso de nuestra ciudad con el Proyecto halcón peregrino Zaragoza  (http://www.phpz.es/) o con técnicas de "hacking" como han hecho en Barcelona (http://www.falconsbarcelona.net/Falco11/es_pagines/projecte3.html).

En Zaragoza se ha conocido tradicionalmente la nidificación de los halcones en alguna de las torres del Pilar y, más antiguamente, en La Seo. También hay datos de cría en otros sectores de la ciudad, pero no se conoce con precisión cuántas parejas residen habitualmente dentro del casco urbano.

El edificio del WTCZ es el lugar donde los veo más a menudo, especialmente entre julio y noviembre, posados sobre las letras que identifican esta mole y alternándose a menudo con ejemplares de cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) a los que también les gustan estas letras para posarse. Desde su atalaya los halcones nos ven pasar a los ciudadanos como hormiguitas, pero desde abajo casi nadie repara en su presencia. La abundancia de presas potenciales (palomas domésticas y torcaces, tórtolas turcas, estorninos negros, zorzales charlos, etc.) en el entorno puede ser un atractivo adicional para los halcones en esta zona de la ciudad.