domingo, 30 de noviembre de 2014

Los escribanos palustres ya están aquí / Common Reed Bunting / Bruant des roseaux

Hembra de escribano palustre entre los carrizos en el Parque del Agua. 28/01/13
Aunque en número reducido, el escribano palustre (Emberiza schoeniclus) es una especie habitual de paso e invernando en algunos carrizales de la ciudad, todos los años los veo en las formaciones de Phragmites y Typha en las balsas de filtro verde, canales y lagos del Parque del Agua.
No hay datos recientes de reproducción de esta especie en Aragón, donde sin embargo resulta localmente común en paso e invernada entre mediados de octubre y finales de marzo.
Tradicionalmente ha sido una especie muy anillada, constatándose que la mayor parte de los invernantes proceden de países centroeuropeos, repúblicas bálticas y Escandinavia.
Macho en Gallocanta. 06/03/14
Su dieta invernal se basa en semillas de carrizo y otras plantas palustres, así como de diversas plantas arvenses. También aprovecha el grano de gramíneas cultivadas que suele obtener en rastrojeras tras la cosecha, siendo frecuente ver grupos de estas aves en los rastrojos de arroz. Durante el periodo de cría consume muchos más insectos y otros pequeños invertebrados.
Escribano palustre en carrizal del Parque del Agua. 09/12/13
Según los resultados del programa de seguimiento de aves comunes en invierno (SACIN) de SEO/BirdLife, la tendencia de la población invernante de esta especie en España se considera "incierta". En Aragón existe la impresión de que los efectivos invernantes que se concentraban en los carrizales más importantes se han visto significativamente reducidos en las últimas décadas.  

sábado, 15 de noviembre de 2014

Piquituertos en los pinares de Torrero / Red Crossbill / Bec-croisé des sapins

Un macho de piquituerto posado en un sauce. Monte de Torrero (10/11/14)
Hacía ya unos cuantos años que no conseguía detectar piquituertos (Loxia curvirostra) en la ciudad. En el pasado los había visto en los pinares de Torrero, en zonas con pinos en el Parque José Antonio Labordeta e incluso dentro del propio casco urbano. Por fin, el pasado día 10 de noviembre, volví a oír el típico reclamo que emiten los piquituertos en vuelo mientras paseaba por la zona del Barranco de la Muerte, en el monte de Torrero. Solo vi pasar dos ejemplares, pero más tarde tuve la suerte de toparme con un macho que cantaba primero desde los pinos y después desde un sauce al descubierto.
La disposición de sus mandíbulas, cruzándose la superior sobre la inferior, es lo más característico de esta especie. Este pico tan especializado le permite abrir las piñas de pinos y otras coníferas y acceder a los piñones para alimentarse. 
Hembra de piquituerto sacando piñones para alimentar a uno de sus pollos. Moncayo (31/10/13)
Puede apreciarse su modo de trabajar las piñas en este vídeo que grabé en el Moncayo hace aproximadamente un año: una hembra saca piñones de una piña de Pinus sylvestris para cebar a un pollo.
Debido a su alta especialización, los piquituertos están estrechamente ligados a los bosques de coníferas, realizando grandes desplazamientos y adaptando su fenología reproductiva en función de la producción local de piñones.
Macho de piquituerto sosteniendo una piña que acaba de arrancar con su poderoso pico. Moncayo (31/10/13)
En Aragón el piquituerto puede observarse prácticamente en cualquier bosque de pinos o abetos, aunque su presencia sufre grandes oscilaciones según la producción de piñones. Por lo general su presencia es más constante y numerosa en los pinares de media y alta montaña, pero tampoco es raro en pinares mediterráneos de Pinus halepensis en pleno valle del Ebro. 
Se comporta como especie irruptora que, ante la falta de producción de piñones, puede abandonar en masa sus áreas de origen para desplazarse a grandes distancias hasta localizar zonas con buenas cosechas de piñones.
Hembra de piquituerto posada en una rama de Pinus sylvestris. Moncayo (31/10/13)




domingo, 2 de noviembre de 2014

Águilas reales en los confines de la ciudad / Golden Eagle / Aigle royal


Ejemplar joven de águila real. Monegros zaragozanos. Abril de 2008.
El águila real (Aquila chrysaetos) es una rapaz de porte majestuoso que en el imaginario popular suele relacionarse casi exclusivamente con altas montañas y parajes remotos, sin embargo, las estepas del valle del Ebro -incluido el entorno de la ciudad de Zaragoza- acogen un contingente importante de parejas reproductoras y jóvenes en dispersión. En una franja de unos 20 km de anchura en torno al cuarto cinturón (Z-40) de la ciudad se conocen un mínimo de 10 territorios de cría. 
Ejemplar adulto de águila real apostado sobre una colina de yesos. Monegros zaragozanos. Julio de 2009.
Las águilas reales son superpredadores que viven en parejas regentando grandes territorios cuya superficie puede rondar los 100-200 km2. Según los datos del censo nacional de águila real del año 2008 (Del Moral, J.C. (Ed), 2008), Aragón contaba con 255 parejas seguras, calculándose para la parte aragonesa de la depresión del Ebro una densidad de 0,6 parejas/100 km2. La proximidad de territorios de cría y zonas de caza y campeo, posibilita la presencia más o menos esporádica de algún ejemplar de águila real sobrevolando las zonas más favorables de la periferia urbana, especialmente los baldíos y secanos al sur de la ciudad, donde proliferan los conejos (Oryctolagus cuniculus), presa de elección del águila real en el valle del Ebro.

Secanos en los montes de Torrero.
Conejo silvestre, presa de elección para las águilas del valle del Ebro. Monte de Juslibol.  Mayo de 2010.

Al noroeste de la ciudad, los montes de Juslibol y las zonas colindantes del campo militar de maniobras de San Gregorio también forman parte de las áreas de campeo que patrullan habitualmente las águilas reales.
Águila real adulta remontándose sobre el campo de maniobras de San Gregorio.  Marzo de 2014.
La fotografía, de carácter testimonial, está tomada a gran distancia desde la alambrada de separación con el monte de Juslibol.
Adulto de águila real al acecho sobre las ruinas de una paridera en Monegros zaragozanos. Noviembre de 2013.